Esta es la clase de notas que me gusta escribir, y más cuando crees que alguna especie ha desaparecido y aparece sorpresivamente.

Resulta que en 1981, la abeja más grande del mundo había desaparecido. La abeja gigante de Wallace que es originaria de las selvas tropicales de Indonesia, y que es cuatro veces más grande que una abeja típica se creía extinta.

Con mandíbulas gigantes y una envergadura de 6 centímetros, casi tan larga como el lado corto de un billete de dólar. (Esas son las hembras; los machos tienen aproximadamente la mitad de ese tamaño). Ahora, la abeja, se ha encontrado en estado salvaje, anunció hoy un grupo de conservación.

Como parte de un proyecto para redescubrir especies perdidas en todo el mundo, cuatro entomólogos y fotógrafos recorrieron las Molucas del Norte en las islas de Indonesia en busca de la abeja gigante de Wallace ( Megachile Pluto ).

Después de 5 días de búsqueda, localizaron a una sola hembra dentro de un nido de termitas en lo alto de los árboles; las abejas construyen sus propios nidos dentro de tales estructuras , defendiéndose con savia de árbol que recolectan con sus fuertes mandíbulas.

La abeja fue descubierta por primera vez en 1858 por el naturalista Alfred Russell Wallace, quien desarrolló la teoría de la evolución por selección natural al mismo tiempo que Charles Darwin.

En ese momento, Wallace notó las grandes mandíbulas de la abeja, que se parecían a las de un escarabajo ciervo. Pero Wallace fue la última persona registrada hasta que un entomólogo de la Universidad de Georgia en Atenas encontró varios en 1981.

Pero no todo son buenas noticias ya que el estado de la especie ha sido desconocida desde entonces.

La amenaza más grande para las abejas son los recolectores de insectos, que pueden estar atacando a la especie, así lo informó Robin Moore para Global Wildlife Conservation, una organización sin fines de lucro en Austin y que patrocinó la búsqueda.

Pero la mayor preocupación es la pérdida del hábitat, ya que los bosques de Indonesia se están talando para la agricultura. Los investigadores desean crear un plan de conservación para la especie, y Global Wildlife Conservation espera que la publicidad de la abeja ayude a crear conciencia sobre su protección.